La Concentración Mental
La concentración es un proceso psíquico que se realiza por medio del razonamiento; consiste en centrar voluntariamente toda la atención de la mente sobre un objetivo, objeto o actividad que se está realizando o pensando en realizar en ese momento, dejando de lado toda serie de hechos que puedan interferir en tu atención. Para una persona debe movilizar varios recursos cognitivos como: clasificar, comparar, relacionar, asociar, percibir, memorizar y pensar.
La concentración nos permite «meter» una información en nuestra cabeza de manera que toda nuestra atención quede centrada en un objetivo concreto, y se consiga que no nos distraigan otros tipos de informaciones.
Algunas causas que afectan nuestra capacidad de concentración
- Agotamiento físico: generalmente producido por exceso de trabajo, porque no descansas adecuadamente o no llevas una buena alimentación.
- Cuando permaneces mucho tiempo en una sola actividad suele causarnos distracciones. Lo recomendable es dedicar una hora a una materia a otra materia realizando una tarea diferente, eso hará que logre mantener la atención y concentración.
- Cansancio intelectual: la fatiga a causa de muchas horas de trabajo, la realización de muchas actividades sin el descanso adecuado, la dedicación sólo al trabajo o a la escuela sin actividades placenteras, son un factor determinante para distraerte y no lograr concentrarte.
- Ambiente poco adecuado: no lograrás terminar un trabajo importante en un bar lleno de gente pasándolo bien. Elegir el ambiente adecuado es clave para lograr un buen nivel de concentración. Al momento de realizar una labor, no la realizamos al aire. Nos situamos en un contexto determinado y en un ambiente, donde frecuentemente fluyen diversos estímulos que pueden causar interferencia en nuestra actuación cuando una situacion pide mas de nuestra atención
- Envejecimiento: la capacidad de concentración así como las capacidades mentales, como la memoria, podrían no ser estables, sino que por cosas de la vida, van disminuyendo paulatinamente con la edad. Esta pérdida es algo dee referencia normativa, sin que esté atada o relacionada con ningún tipo de demencia.
- Competencia de tareas. Realizar varias actividades al mismo tiempo suele ser algo complicado, así poseamos cierta capacidad y habilidad de atender varias cosas, siempre se hará necesario dedicarse con más atención a alguna de ellas, resultando la otra solo distractora.
- Malestar y ansiedad. En situaciones donde nos sentimos mal, donde acabamos de tener traspié con alguna situación de molestia o nos encontramos en un estado nervioso, concentrarse puede ser toda una hazaña, pues el mismo malestar atrapara parte de nuestra atención.
- Desmotivación . Si realizamos alguna actividad que no nos gusta, lo mas seguro es que presentemos una falta de concentración, la motivación es factor fundamental al momento de enfocar nuestro recurso de atención.
- Energía excesiva y felicidad extrema. La felicidad que podamos sentir, puede arrebatarnos parte importante de nuestra concentración y enfocarse en otros asuntos puede ser complicado, hasta conflictivo. Un nivel alto de energía puede ocasionar que la atención se eleve y movilice de un lado al otro, no pudiendo prestar la debida atención.
¿Cómo mejorar la capacidad de concentración?
Mantener nuestro cerebro atento a una situación es difícil, y cuando nos distraemos, se estima que se requiere entre 20 y 25 minutos para poder volver a concentrarnos en eso que hacíamos, lo que supone un gasto bastante elevado de tiempo y esfuerzo mental.
Hoy en día tenemos de forma permanente cantidad de estímulos a nuestro alrededor que pueden incitarnos a la distracción. ¿Y qué ocurre? Pues que poco a poco nos vamos acostumbrando a prestar atención a esas distracciones por lo que vamos perdiendo nuestra capacidad de concentración.
Por ello es beneficioso para el crecimiento integral de un ser humano, entrenar la capacidad de concentración a través de diferentes estrategias.
Como recomendaciones generales UD. podría:
- Practicar Mindfulness: se ha demostrado científicamente que mejora la concentración. Una práctica diaria de 20 minutos mejora la función cerebral, y aumenta la capacidad de concentración, mejora el procesamiento de información y acelera el aprendizaje de conocimiento nuevo.
- Alimentación para el cerebro: ingerir alimentos ricos en omega-3 favorece el desarrollo del cerebro y con ello, a tu concentración.
- Practicar algún deporte: Al hacer 20 minutos de ejercicio diario, se oxigena el cerebro y baja el estrés, favoreciendo la capacidad de atención, memoria, percepción y por supuesto para la concentración.
- Comprender a los niños: la capacidad de mantener la atención se va desarrollando con la edad y es importante que este acorde a la edad para no sobre exigir a un niño el mantenerse concentrado en una tarea, como vemos en la siguiente tabla de Relación de la edad con el período de concentración:
Edad Tiempo de concentración
La concentración es imprescindible en el proceso de aprendizaje de un ser humano. La atención permite filtramos lo más importante de lo que se quiere aprender, centrando nuestra atención en un estímulo deseado durante el tiempo necesario para asimilarlo y nos apoya a ignorar todos los demás estímulos.
Ejercicios para potenciar la concentración
- Hacer una organización del entorno, eliminando estímulos innecesarios del ambiente, antes de iniciar la tarea que requiere concentración. Por ejemplo, cerrar la puerta, silenciar el móvil, ordenar el escritorio, etc.
- Estructurar y priorizar las tareas que requieres realizar, por orden de prioridad. Anótalas y define con cuales comenzarás.
- Hacer una tarea a la vez, así concentra tus pensamientos en un solo objetivo y así eliminar la multiplicidad de pensamientos en nuestra mente. ¿Cómo hacerlo? Haga el siguiente ejercicio: siéntate en una silla, y cuando estés relajado, de entre todos los pensamientos que se te vienen a la cabeza elige solamente uno. El pensamiento que elijas puede ser cualquiera, una vez que lo hayas elegido, dedica unos 5 minutos a pensar en él y en nada más. Si realizas este ejercicio de forma regular, te acostumbrarás a poder centrar tu atención en un solo pensamiento cuando sea necesario y mejorar tu concentración te será más fácil.
- Relajarse: estar en un estado emocional ansioso o nervioso, limita nuestra capacidad de concentración, por ende se debe aprender a llevar la mente hacia un estado relajado antes de estudiar o concentrarse en una tarea importante.
Puede en este caso realizar un ejercicio de respiración profunda como es siguiente:
- Siéntate cómodamente, cierra suavemente los ojos, y coloca tu mano derecha sobre el abdomen.
- Inspira por la nariz y expira por la nariz o por la boca.
- Haz una inspiración lenta por la nariz (5 segundos), retén el aire durante otros 5 o 7 segundos y expira el aire durante unos 10 segundos.
- Mientras realices la respiración imagina que la tensión se escapa por el aire expirado y te liberas de ella.
- Realizar este proceso 3 veces seguidas.
- Una vez realizadas las tres veces, pasar a una respiración controlada: inspirar por la nariz durante 3 segundos y expirar durante otros 3 segundos, pero sin retener el aire.
- Hacer ejercicios con números: realizar cálculos matemáticos, activa el cerebro racional, lo que permite desconectar el cerebro emocional y al realizar ejercicios lógicos en tu tiempo libre , apoyarás el desarrollo de tu capacidad de concentración.
Otro ejercicio que puede ayudar es esta sopa de letras, marque con un lápiz lo siguiente:
- Todos los número 4 que encuentres.
- Todas las letras T que encuentre.
- Todos los números impares que encuentres.
- Todas las vocales que encuentres.
Una vez realizado, anota el tiempo empleado en realizar las cuatro tareas.
- Practicar la atención plena, es una técnica de Mindfulness que puedes realizar en cualquier momento del día: antes de ir a trabajar, mientras esperas el autobús o cuando haces una pausa en la oficina.
Cuando se sienta estresado(a), y necesite claridad de ideas, centre su respiración durante 2 minutos, hasta lograr restaurar tus pensamientos, te relajes y obtengas esa claridad mental que puedes haber ido perdiendo durante el día. Para hacerlo debe estar de pie, dejar los ojos abiertos, respirar con el vientre (no con el pecho), expulsar el aire con la nariz y centrar toda tu atención en el sonido y ritmo de tu respiración. Es probable que cuando lo hagas te vayan viniendo otros pensamientos a la cabeza. Cuando esto suceda, esfuérzate para devolver tu atención a la respiración y no hacer caso a otros estímulos.
- Practicar la observación consciente escoja un objeto cualquiera y obsérvelo muy atentamente y conseguir centrar toda tu atención en él durante unos 3 o 4 minutos. Este ejercicio rompe con la rutina de su mente.
- Crear una imagen mental de un objeto, escoja un objeto cualquiera que tengas a mano (un lápiz, un tenedor, unos zapatos…) y observelo de forma minuciosa, centrando toda tu atención en él, e intentando recordar cada detalle de ese objeto por unos 2 o 3 minutos. Luego cierre los ojos y recrear una imagen mental sobre el objeto en su cabeza, de manera que esa imagen sea lo más parecida posible al objeto. Con este ejercicio, aparte de centrar tu atención en el presente como en el anterior, trabajarás tus procesos de almacenamiento de información, por lo que deberás realizar un trabajo de concentración extra para recuperar la información del objeto que acabas de observar.
- Describir recuerdos. Cuando recordamos, aparte de ejercitar nuestra memoria, estamos entrenando nuestra concentración de forma indirecta. Ahora bien: debemos recordar de una forma estructurada y detallista, no vale pensar en hechos pasados sin centrar nuestra atención de forma completa en ellos. Por ejemplo recuerde sus últimas vacaciones, escribiendo todos los detalles que recuerde de ellas: dónde fueron, con quién fuiste, qué lugares visitaste, qué anécdotas sucedieron, etc. Este ejercicio se puede realizar por la noche, de forma relajada y tranquila, durante unos 30-40 minutos antes de irse a dormir.
Finalmente, recuerde esta frase cuando estés en un momento que necesita atención.
¡AHORA VUELVO A LO MIO!
La mente siempre tiende a dispersarse, uno tras otro, los pensamiento invadirán sus mente, por ello, dígase esta frase cuando su mente intente sacarla de esa tarea que exige su concentración.
“La falta de dirección, no la falta de tiempo, es el problema. Todos tenemos días de veinticuatro horas”. ZIG ZIGLAR