El bullying
Es un tipo de violencia entre escolares, donde participan no sólo los agresores y sus víctimas, sino que también los testigos que presencian estos hechos. Existen factores asociados como el consumo de drogas, alcohol, la obesidad, la sensación de vulnerabilidad, etc. A pesar de que faltan más estudios dirigidos a este tema en nuestro país, se ha visto que los jóvenes chilenos también están involucrados en actos de este tipo, los cuales pueden traer consecuencias especialmente en el área de salud mental, tanto para las víctimas como para sus agresores.
En Chile un 85% de los escolares declara haberlo sufrido bullying en su entorno escolar, éste se relaciona directamente con la salud mental de los afectados (víctimas y agresores).
Factores asociados al bullying
- Los varones prefieren métodos directos de agresión, al contrario de las mujeres que utilizan métodos indirectos. (1)
- Los protagonista pertenecen al periodo de adolescencia temprana. (1)
- El quedarse dando vueltas después de la salida del colegio se asocian más a conductas agresivas, que el irse directo a su casa. (1)
- Los menores que mantienen una relación excelente buena con sus profesores, participan menos en conductas agresivas. (1)
- Los jóvenes con conductas agresivas presentaban mayor consumo de alcohol, marihuana, cocaína y pasta base. (2)
- El tipo de colegio, no influye en las conductas de violencia de sus estudiantes. (2)
- Los estudiantes provenientes de familias con padres separados o divorciados, presentarían un mayor riesgo con respecto a los estudiantes con familias con ambos padres juntos .(3)
- El consumo de televisión durante más de 2 horas al día se asocia significativamente con cualquier forma de acoso escolar (verbal o físico).(4)
- Un estudio canadiense de , observó que las mujeres con obesidad presentaban mayor frecuencia de victimización (2 a 3 veces al mes), con respecto a sus pares con peso normal. Esta diferencia no fue observada en el sexo masculino. Además las adolescentes mujeres con sobrepeso y obesidad eran víctimas preferentemente de acoso verbal y de aislamiento social. Este último tipo de victimización también fue observado en los varones obesos. (5)
- Estudios de la Fundación Paz Ciudadana e Instituto de Sociología Pontificia Universidad Católica. Primer Simposio Nacional de Investigación sobre Violencia y Delincuencia, 2004.
- Encuesta CONACE (www.conacedrogas.cl)
- Bond L., Carlin J., Thomas L. et al. “Does bullying cause emotional problems? A prospective study of young teenagers”
- Kuntsche E, Pickett W, Overpeck M, Craig W, Boyce W, de Matos MG. Television viewing and forms of bullying among adolescents from eight countries. J Adolesc Health. 2006; 39: 908-15.
- Ian Janssen, Wendy M. Craig, William F. Boyce and William Pickett. “Associations between overweight and obesity with bullying behaviors in school-aged children” Pediatrics 2004; 113; 1187-1194
Consecuencias de bullying
Según la investigación de Fekkles M., Pijpers F., Fredriks M. et al. Do Bullied Children (6), realizado con prospectiva de 6 meses, estudió a 1118 jóvenes entre 9 y 11 años. Arrojaron:
- En víctimas: la incidencia de síntomas psicosomáticos (síntomas depresivos, ansiosos, dolor abdominal, problemas de sueño, sentirse tenso o cansado, mojar la cama o disminución del apetito). Se observó una mayor prevalencia de ideación suicida en mujeres y hombres víctimas de bullying indirecto.
- En agresores: sufren síntomas ansiosos o depresivos. Ambos sexos presentan mayor ideación suicida. Además este mismo grupo presentan mayores conductas delictivas que sus pares.
Prevención:
(6) Get Ill, or Do Ill Children Get Bullied? A prospective cohort study on the relationship between Bullying and Health-Related Symptoms. Pediatrics 2006
Debido al impacto y los alcances que está teniendo el bullying en nuestros jóvenes es necesario tomar medidas de prevención, ya que se ha visto que la conducta agresiva en la niñez es considerada como un factor de riesgo para la violencia y conducta criminal en la adultez, además de las repercusiones principalmente en la esfera de salud mental que este fenómeno presenta.
Estrategia de apoyo a adolescentes que sufre/hacen bullying
Saludo
El punto cero de la entrevista lo componen el saludo y el acercamiento primero a la víctima. Ej. saludar por su nombre mirándole a los ojos; efectuar un acercamiento de proximidad tocándole el hombro e invitarle a sentarse en una silla frente a nosotros y sin obstáculos intermedios; hablar en una sala donde no nos interrumpa nadie ni nada, ni haya ruidos ni distorsiones
La información
Será necesario plantear acciones como: hablar del problema; hablar de los hechos que han sucedido; ponerles nombre; identificar el daño; y mostrar nuestro interés por: los incidentes; por cómo se encuentra; qué tal le va en el colegio; qué situación se ha dado.; qué justificaciones se expresan; qué aspectos lo han condicionado; como lo ha vivido. Es importante muy importante que verbalice los hechos y su interpretación.
Abordaje Emocional
El abordaje emocional se centra en descubrir los sentimientos y emociones que se producen cuando suceden los hechos. Será necesario, el identificar sentimientos y emociones y ponerles nombre. Un terapeuta puede apoyar a la decantación moral y ofrecer apoyo en la gestión de esos sentimientos y emociones.
Debemos comunicar nuestra opinión respecto del caso ofrecerle nuestra confianza para resolver el problema, además de necesitar su opinión para resolver el problema.
Debemos interesarnos por sus sentimientos. Ayudarle a que los describa. Que les ponga nombre y los sitúe. Que identifique las emociones que le producen.
Análisis de los pensamientos
Paso continuado es el de incidir sobre la capacidad que tienen nuestros sentimientos y emociones para generarnos pensamientos no siempre positivos. En el caso del bullying, casi siempre, la víctima suele producir pensamientos negativos que son muy dañinos para ella: .”Esto nunca pasará”, ”Verás cuando me pille a la salida”, .”Me resulta insoportable”, ”Soy un cobarde”, ”A nadie parece importarle que sufra”, ”Mañana cuando me los encuentre me van a machacar”, ”Estoy completamente solo”, ”No hay salida”, ”La culpa la tengo yo”, …
Un profesional puede ayudar a la víctima en este punto a que analice sus propios pensamientos. A considerarlos un producto diferente a uno mismo. Sí, producido por él pero distinto y, por tanto, manejable y modificable.
Análisis del afrontamiento
Persigue diferenciar las repuestas efectivas y las ineficaces frente al bullying. Es decir, hacer consciente a la víctima de su estilo de afrontamiento frente a la agresión.
El trabajo se centra en descubrir salidas eficaces frente al bullying y evitar respuestas ineficaces. en este punto se trabaja la comunicación y el lenguaje corporal como mecanismos de prevención del problema.
También se debe trabajar en la búsqueda de ayuda (aprender a identificar en el grupo a quien te puede ayudar, adultos que ofrecen confianza y el fomento de la amistad).
Entrenamiento de la respuesta verbal.
En muchas ocasiones, sobre todo en el caso del perfil de víctima pasiva, quien es maltratado por sus pares no responde a los ataques y no emite respuesta alguna. Se paraliza y no tiene dispuesta una respuesta verbal que permita hacer saber al agresor o agresores que no quiere que eso suceda, que no le gusta y que les pide que dejen de hacerlo. Sin duda, uno de los componentes del bullying es el de rechazo por parte de quien lo sufre pero no es suficiente. El agresor/a debe saber por boca de la víctima que no desea que eso siga sucediendo y a la víctima la debemos entrenar en el ensayo de esa respuesta verbal para que sea capaz de pronunciarla y producirla delante del agresor/a.
Entrenamiento de técnicas de comunicación.
Las técnicas de comunicación pueden ayudar a las víctimas a afrontar, posponer, eludir o evitar determinadas situaciones. En este campo, el trabajo con las víctimas tendría que tender a ayudarles a que aprendan a decir que no cuando no desean algo, incluso ofreciendo alternativas al agresor/a si el caso lo permite; a hablar en primera persona a la hora de expresar deseos, sentimientos y emociones; a ser coherentes en su discurso, a que se les entienda lo que quieren cuando lo expresan; a aprender a decir al agresor/a o agresores/as aquello que nos disgusta o que no nos gusta de él o ellos, de forma sincera y directa y que exprese nuestros deseos de forma inequívoca. En ocasiones será necesario repetir el mensaje reiteradamente con el fin de que al agresor/a no le queden dudas de nuestros deseos.
Muchos agresores/as se excitan y estimulan a seguir agrediendo cuando la víctima reacciona con cabreo, angustia o enfado. Respuestas sorpresivas momentáneamente pueden apartar al agresor/a de sus fines. Incluso, en ocasiones, la evitación de la confrontación directa con el agresor/a (banco de niebla) puede facilitar que consiga sus objetivos mediante respuestas inesperadas o mediante el uso de interrogaciones negativas.
El trabajo con la respiración
Será un uso transversal en toda la intervención, como el caso de la relajación. Ambos ámbitos requieren una intervención combinada ya que la víctima, en ocasiones, no es capaz de pronunciar los apelativos que sufre por parte de sus compañeros, sin ponerse nervioso o sentirse tenso. Igual le sucede cuando rememora las situaciones de victimización o le pedimos que imagine un encuentro con el agresor/a.
El trabajo con la respiración puede rebajar los momentos de rabia o tensión o los niveles de ansiedad en la propia víctima. Usaremos inspiraciones y expiraciones lentas haciendo que el sujeto se concentre en el ritmo de la respiración mientras trabajamos las situaciones con él.
El uso de la relajación
La relajación combinada con el trabajo de la respiración debe llevar al sujeto a asociar situaciones placenteras vividas previamente con el fin de conseguir este objetivo. Combinado con la música y en un ambiente que contribuya a ello, invitaremos al sujeto que vaya relajando progresivamente determinados músculos haciendo que los sienta cada vez más pesados, no pensando en nada y dejando la mente en blanco.
La mirada
El trabajo de la mirada la debemos hacer frente al espejo y conlleva el trabajo con otras partes del cuerpo que debe mantenerse en posición erguida. Hombros, tronco y piernas deben expresar lo que perseguimos, que queremos demostrar un mismo nivel de derechos que el agresor/a, por eso lo miramos a los ojos, y expresamos corporalmente esa seguridad, hasta donde podamos, que tenemos que entrenar previamente frente al espejo.
La posición corporal
Entrenar frente al espejo movimientos erguidos de nuestro cuerpo sin que las manos, la cabeza o la mirada exprese miedo o inseguridad.
Aprender técnicas de defensa corporal
Aprender algunas herramientas de defensa personal, ayuda al adolescente a defenderse en situaciones de peligro y no ser empleadas para alimentar la escalada del conflicto o del problema que se pretende resolver.